El Día de San Lorenzo, mártir y Patrono de los Diáconos Permanentes se celebró con una Eucaristía en la que también se celebraron los 50 años de la instauración del Diaconado Permanente en nuestro país.

Al inicio de la Misa Mons. Gonzalo Duarte, Obispo de Valparaíso informó que el sábado 23 de septiembre a las 10:00 horas en la Iglesia Catedral de Valparaíso se realizará la Ordenación de cuatro nuevos Diáconos Permanentes: Claudio Fernández, Luis Vergara, Luis Albanez y Ricardo Jara.

En su homilía. Mons. Gonzalo Duarte Obispo de Valparaíso, destacó la espiritualidad del Diácono Permanente, que es la espiritualidad de todo cristiano. “Dios ama al que da con alegría. Tenemos que darnos, pero con alegría. Entonces tenemos que revisar nuestra actitud personal de vida familiar, laboral, social y nosotros de vida ministerial, y preguntarnos si estamos dándonos con alegría. Habitualmente no es fácil, pero el Señor nos ayuda, no nos deja solos, está permanentemente con nosotros”.

“Todos los que somos sacerdotes y obispos llevamos un diácono en el corazón porque el primer paso para el presbiterado es el diaconado. En cambio, los diáconos permanentes están ordenados para permanecer en el orden diaconal”. También resaltó la importancia de tener una vida espiritual activa, hay que hacer un camino de crecimiento espiritual.

Además, recordó que la celebración de este año es muy importante, ya que se celebran los 50 años de instauración del Diaconado Permanente en Chile. “El diaconado permanente ha sido una riqueza para la Iglesia en Chile. En nuestra diócesis hay 80 diáconos permanentes (70 de ellos en servicio activo) y 29 alumnos en la Escuela Diaconal Felipe Diácono.

El 4 de septiembre de 1967, la Conferencia Episcopal de Chile, la primera en pedirlo a nivel mundial, solicitó a la Santa Sede la autorización para establecer el diaconado permanente en Chile. El primer diácono de nuestra diócesis fue Don Guillermo Máximo Valdés, ordenado el 20 de diciembre de 1969 de manos del Obispo de Valparaíso Monseñor Emilio Tagle Covarrubias.

Además, se refirió al testimonio de San Lorenzo, cómo fue su vida y la forma en que murió, manteniendo su fe inquebrantable en el Señor. “San Lorenzo trabajó a favor de los pobres porque los primeros diáconos en la Iglesia fueron para atender a las viudas y los huérfanos.

Finalizó su homilía agradeciendo al Padre Roberto Pinto, delegado Episcopal para el Diaconado Permanente, por su servicio y entrega por los diáconos. También agradeció al actual Director de la Escuela el diácono Luis Basso y recordó a quienes lo antecedieron: los diáconos Mario Rojas y Juan Carlos González. A su vez, agradeció a las esposas de los diáconos por su generosidad y apoyo como también a sus familias.

Al término de la homilía, los diáconos permanentes de nuestra diócesis renovaron sus promesas diaconales.

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