Un domingo 3 de enero de 1864 llega a Rapa Nui quien es considerado el primer evangelizador de la Isla, el Hno. Eugenio Eyraud, 142 años después de su descubrimiento por el navegante holandés Jacobo Roggeveen un domingo de Pascua de 1722.

Durante ese largo tiempo de casi un siglo y medio, los nativos presenciaron una sola vez un acto religioso cristiano, el 20 de noviembre 1770. Por encargo del Virrey del Perú habían salido del puerto del Callao los buques “San Lorenzo” y “Santa Rosalía” bajo el comando de Felipe González y Antonio Dumont, para ubicar nuevamente esta Isla que, después de su descubrimiento por Jacobo Roggeveen, había sido en vano buscada por navegantes en sus viajes por el Pacifico.

Todos los primeros domingos del año se realiza la Santa Misa en recuerdo y gratitud de tan significativo momento; después de la Eucaristía se realiza un responso en la sepultura del Primer Evangelizador que está a un costado del templo y luego se comparte con un sencillo desayuno para todos los presentes en la Misa.

En esta oportunidad, nuestro Párroco Pbro. Bernardo Astudillo Basulto en su homilía enfatizó la concreción que se ha venido realizando durante los siglos de la Primera Epifanía a los pueblos que estaban fuera de la fronteras de Israel, y este lugar el más aislado del mundo no estuvo exento de este misterio, del deseo de Dios de darse a conocer a todos los pueblo por medio de Jesucristo.

Fuente: Comunicadores Parroquiales de Isla de Pascua

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