Gran cantidad de feligreses y niños de la catequesis familiar, llegaron hasta el templo parroquial Nuestra Señora del Rosario de Puchuncaví, el pasado domingo 04 de octubre a celebrar a su patrona la Virgen del Rosario.
La celebración comenzó en la mañana con el saludo del baile chino Peregrino de Puchuncaví para luego comenzar con la Santa Misa que presidió el Párroco Padre Andrés Valenzuela, acompañado de los diáconos Ismael Morales y Gustavo Álamos.
Las lecturas bíblicas del domingo fueron leídas por feligreses de la comunidad parroquial.
Durante la homilía el Padre Andrés señaló “que hoy comienza el Mes de la Familia en Chile es así que en este domingo las lecturas bíblicas nos ofrecen lo que podríamos llamar lo fundamental de “la visión cristiana del matrimonio”. La primera lectura, tomada del segundo relato de la creación (Gen 2) y el Evangelio están profundamente relacionados. En ambas se hace referencia al proyecto originario de Dios que ha creado al ser humano para la relación y para la comunión, pues “no es bueno que el hombre esté solo” (Gen 2,18).
Jesús ahonda en el misterio original del ser humano. Dios “los ha creado varón y mujer”. Los dos han sido creados en igualdad. Dios no ha creado al hombre con poder sobre la mujer. No ha creado a la mujer sometida al hombre. Entre hombres y mujeres no ha de haber dominación por parte de nadie”.
Aún cuando se contempla una ley de divorcio, no puede hacernos olvidar que el divorcio sigue siendo un hecho lamentable tras el cual se descubre siempre la existencia de un error, una equivocación o una infidelidad. Tal vez uno de nuestros mayores riesgos es el de ir cambiando poco a poco la valoración de las cosas. Al escuchar hoy a ciertas parejas jóvenes da la impresión de que para ellos lo importante es tener la posibilidad de divorciarse, cuando lo verdaderamente importante y decisivo es que los esposos aspiren a quererse con plenitud y autenticidad.
Pidamos a Dios que nos permita construir familias con sólida base de amor, comprensión, diálogo y perdón. Que los hijos sólo reciban el cariño y amor de sus padres y no las discusiones e intereses personales de los adultos.
Finalizada la eucaristía se dio comienzo a la procesión de la Virgen del Rosario por las calles de la comuna, acompañado del baile chino y los feligreses, rezando por las diversas intenciones y cantando a la Virgen donde la comunidad puchuncavina acompañó a nuestra Madre.
Al finalizar la procesión el Padre Andrés, agradeció a todos los presentes que acompañaron la procesión y a los portadores del anda de la Virgen donde se les impartió la bendición.
Fuente: Mauricio Tobar, Comunicador Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Puchuncaví
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