La Parroquia de Rapa Nui convoca todos los años a la Fiesta de la Familia. Tuve el regalo de participar de ella. Lamentablemente sólo en pocos renglones podré contarles lo que viví.
El día de la Familia Rapa Nui se celebra en la Playa de Anakena, no porque tenga aguas tibias color turquesa o un centro ceremonial con 8 moais[1]; sino porque allí desembarcó Hotu Matua, proveniente de otras islas de la Polinesa, fundando la familia Rapa Nui alrededor del siglo 11. Allí también desembarcó el primer evangelizador de la Isla en 1864, el Hermano Eugenio Eyraud. Sangre y fe se unieron para hacer de los habitantes de Rapa Nui un pueblo católico con mucha admiración por sus ancestros y respeto por sus hijos. Son una clara demostración de la inculturación de la fe.
Este día de celebración, incluye misa y mesa acompañado por la melodiosa música Rapa Nui. Comienza varias semanas antes, con una organización en donde todos donan algo para la comida: el tradicional Curanto[2], las ensaladas[3], las batatas, la sopaipilla[4] y el poe[5]. Llegan a participar más de 2000 personas, es gratis y figura en las guías turísticas, por eso van también personas que están de paseo en la Isla; todos son recibidos con alegría por los Rapa Nui.
La Misa se celebra en el imponente escenario de los Moais, monumentos que denuncian el corazón trascendente de este pueblo, que no sólo reconoce sus ancestros sino también a un Dios Creador y dador de esa creación. La liturgia alterna lengua Rapa Nui y española, el sacerdote asume ornamentos de la cultura de la Isla, los cantos son con el idioma, la música y los instrumentos propios del lugar. Las flores, la danza, las expresiones, el color blanco en la vestimenta son el espejo de la alegría por el encuentro entre ellos y con Dios. Siempre aquí se realizan bautismos, matrimonios, primeras comuniones. En las redes de Madre Catalina podrán encontrar más fotos y videos que les permitirá asomarse por segundos a la belleza de lo que les estoy contando.
Al terminar la Misa el Padre bendice el Curanto y ordenadamente todos pasan a retirar lo que va a comer su familia, lo comparten bajo las palmeras, animados por la misma orquesta que cantó en la Misa, unas 15 personas que alegremente recorren por horas el repertorio de la música Rapa Nui.
Sin saber nada de música, sus melodías me llevan al sonido de las olas en el mar; son parecidas pero diferentes y no cansan al escucharlas. Uno de los que cantaban me dijo que si la música gusta es porque está en armonía con la Creación, otro, que tocaba la mandolina, al agradecerle por lo que hacían me dijo que la misión de ellos es llevar alegría a través de la música. Automáticamente me nombró los sacramentos del bautismo, eucaristía, confirmación y matrimonio como causas de alegría. También la muerte la celebran con alegría, alegría del encuentro de su ser querido con sus ancestros y con Dios. Otra de las razones por las que cantan sus canciones es para recordar a los mayores y enseñarles a los jóvenes y niños. También son un ejemplo las personas que desde temprano hacen el curanto, el poe, las sopaipillas y los que los sirven.
Este día de la Familia recuerda el origen de la fundación de la Familia Rapa Nui en el lugar de fundación. Agradece la fe en el sitio de su llegada, celebran con sus ritos esas raíces y esa fe, por ej, me emocionó ver a una Familia Cantando una canción religiosa a los pies de los Moais, en el mismo lugar en que sus antepasados honraban a Dios a través de esas construcciones. La raíz sigue viva, la fe está intacta yasí se construye cultura sobre roca.
Aprendí lo que se siente ser familia de una gran familia que viene de hace siglos, no sólo desde que desembarcó Hotu Matua allí, sino desde que Cristo fundó la Iglesia. La cultura propia de los Rapa Nui no afectó la fe y, la fe sabiamente, supo asumirla.
Familia construida sobre roca, no se queda en el pasado ni teme al futuro. Une esperanzadamente, a ambos en el presente.
Madre Catalina, Madre de una Gran Familia, también asumió la cultura de la época y sobre ella desplegó el Evangelio. A los herederos de su Sueño Dorado nos toca seguir uniendo pasado y futuro amando y reparando cada día, celebrando ser miembros de la Gran Familia de la Humanidad.
Estamos en un tiempo en donde el diagnóstico general es una crisis de valores y de la sociedad. Quizás la Fiesta de la Familia Rapa Nui pueda darnos pistas para recorrer el camino hacia la solución.
1 Monumentos a los ancestros de varios metros de alto que caracterizan a esta Isla.
2 Carne de pescado y vaca cocinados bajo tierra con piedras calientes y hojas de plátano.
3 El día anterior a la fiesta, todos lavamos y cortamos lechugas y tomates ¡hasta el párroco! (foto)
4 Masa a base de zapallo que se corta en redondeles y se fríe (foto)
5 Especie de Bizcochuelo hecho con Plátano, Batata o Zapallo (foto)
Fuente: Pastoral de Comunicaciones
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