El día 2 de enero, a la edad de 76 años, el Señor ha llamado a su presencia al R.P. David Ignacio González Fuenzalida, sacerdote misionero Redentorista, luego de una prolongada enfermedad, la cual enfrentó siempre de la mano de Dios y nuestra Madre del Perpetuo Socorro.

Incansable misionero que hizo suyo el texto fundacional y se dejó guiar por el Espíritu de Dios para anunciar con misericordia y amor el Evangelio, la Buena Noticia, a los más pobres y abandonados. Vivió su apostolado en diversos lugares del país, desde Santiago hasta la Patagonia, siempre con alegría y disponibilidad, cercanía y sencillez. Su vida y misión refleja sin duda lo que san Alfonso plasmaba en nuestras constituciones como ideal para un misionero Redentorista: “Los redentoristas son apóstoles de fe robusta, de esperanza alegre, de ardiente caridad y celo encendido. No presumen de sí y practican la oración constante. Como hombres apostólicos e hijos genuinos de san Alfonso, siguen gozosamente a Cristo Salvador, participan de su misterio y lo anuncian con la sencillez evangélica de su vida y de su palabra, y por la abnegación de sí mismos se mantienen disponibles para todo lo arduo a fin de llevar a todos la redención copiosa de Cristo.”

Como buen y fiel misionero el padre David vivió el fin de todo Redentorista: “seguir el ejemplo de nuestro Salvador Jesucristo” en el compromiso de dar la vida por la abundante Redención, como parte esencial de su entrega. Ser Redentorista significó para él no ahorrarse su vida, sino que la ofreció generosamente y con alegría.

Fuente: Parroquia Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, Valparaíso 

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