En estos últimos meses, el Decanato Juan XXIII ha desarrollado distintas actividades y acciones que han llamado la atención de la Diócesis. Instancias de formación, actividades para celebrar Fiestas Patronales y reuniones con profesores de Religión, son algunas de ellas. Sin embargo, lo que más destaca es el trabajo en conjunto que llevan adelante los laicos con el clero.

Su decano, el P. Cristian Villalón, aseguró: “Estamos viviendo una experiencia muy hermosa aquí en el decanato a través del sínodo, porque estamos viviendo la sinodalidad y eso nos lleva a realizar nuestros encuentros en conjunto el clero con los laicos, y la mayoría de las veces son ellos quienes nos mueven a los sacerdotes”. Y agregó: “Por ejemplo, nos reunimos el segundo martes de cada mes, somos alrededor de 30 personas, de distintas parroquias, y las reuniones de decanatos decidimos realizarlas en distintas parroquias para así ir conociéndolas, hacemos un recorrido por el templo y nos van contando su historia. Nuestros encuentros son en clave de sínodo, es decir, el clero y los laicos, todos juntos. Y ha sido una bonita experiencia que nos ha llevado a realizar varias actividades”.

Así lo reafirma Viviana Briseño, coordinadora parroquial e integrante del Decanato Juan XXIII: “Es muy buena esta dinámica de que participemos laicos y el clero porque es más abierto, uno se entera de lo que está pasando en la Iglesia, tanto ellos como nosotros, entonces ha sido bastante interesante eso. Además, es muy bueno para nosotros, los laicos, porque hay más unión entre nosotros, en el decanato y nos damos cuenta que vamos trabajando súper bien”.

Trabajo en equipo

“Si bien en la estructura del Derecho Canónico se habla de Decano y Vice Decano, no se menciona un equipo, pero nosotros decidimos formar un equipo, e incorporamos a un Diácono y a un laico también”, explica el P. Cristian Villalón, quien además es párroco de la Parroquia San Vicente de Paul de Playa Ancha, Valparaíso. Actualmente este equipo está conformado por el Decano, P. Cristian Villalón; el Vice Decano, P. Víctor Godoy; el Diácono Ricardo Jara y la secretaria Jeannette Villalobos, quienes fueron elegidos por las comunidades a través de votaciones. El presbítero explica además que se organizan para que cada uno dirija una reunión.

El decano contó además que antes en las reuniones del Decanato participaban sacerdotes y Diáconos, y para evitar que se pierda ese contacto decidieron mantener una reunión bimensual con ellos.

“Si no caminamos juntos con los laicos la sinodalidad va a quedar en el papel y no es esa la idea. (…) Vivir la sinodalidad es más exigente porque implica más desafíos, más trabajo y más reuniones, pero es lo que la Iglesia nos está pidiendo”.

Celebrar como decanato las Fiestas Patronales

A propósito de la cantata a la Virgen del Carmen que se realizó en Valparaíso y que resultó muy bien recibida por la comunidad, con una asistencia de más de 300 personas, el decano explicó que tratan de acompañarse en las Fiestas Patronales a nivel decanal, apoyando así a las parroquias. “De esa manera vivimos un signo de comunión, ya no es “me quedo en mi parroquia solamente”, sino que es salir y acompañar a las otras comunidades del decanato”, expresó el P. Cristian Villalón.

Aprendizajes y desafíos de la sinodalidad

Viviana Briseño, del decanato Juan XXIII reflexiona acerca de los aprendizajes de este tiempo: “He conocido a más personas, a más agentes pastorales y también a más parroquias. Ha sido muy enriquecedor saber más de otras parroquias, conocer a otros catequistas, conocer cómo trabajan otras parroquias un tema y después eso poder replicarlo en la propia, o al revés, el poder compartir experiencias”.

En cuanto a los desafíos, el P. Cristian Villalón sostiene: “Creo que el desafío que tenemos es afianzarnos más como grupo, desarrollar un plan de trabajo y seguir teniendo esta linda experiencia con los laicos. También, poder trabajar más con los colegios para poder llegar a los jóvenes. Y en ese sentido, aprender a cómo relacionarnos con los jóvenes, porque quizás tenemos actitudes que han quedado obsoletas y no sabemos cómo relacionarnos, cómo lograr aplicar con ellos conceptos como la acogida y la escucha, por ejemplo”.  

En ese sentido, Viviana Briseño apuntó: “Tenemos el desafío de atraer a las personas que vienen a misa”, a lo que el párroco de la comunidad San Vicente de Paul, de Playa Ancha, complementó: “Si no caminamos juntos con los laicos la sinodalidad va a quedar en el papel y no es esa la idea. También el desafío es animar a que participen otros, porque siempre son los mismos, y quizás para ello debamos realizar más actividades lúdicas”. Y agregó: “Vivir la sinodalidad es más exigente porque implica más desafíos, más trabajo y más reuniones, pero es lo que la Iglesia nos está pidiendo”.

“Somos un decanato muy movido y creo que es porque los catequistas siempre queremos algo más, no quedarnos. Y los sacerdotes siempre nos han apoyado”.

Actividades

“Somos un decanato muy movido y creo que es porque los catequistas siempre queremos algo más, no quedarnos. Y los sacerdotes siempre nos han apoyado. Hemos tenido harta formación y actividades. Ahora estamos pensando en que queremos hacer un retiro, así que tenemos que pedirles a los sacerdotes para que nos acompañen a organizar eso”, expresó Viviana Briseño.

“Lo bueno es que hay muchos sacerdotes motivados en trabajar por su gente, hay mucha voluntad y ganas de acompañar a la comunidad”, agregó el P. Cristian Villalón. Y comentó que han realizado talleres de formación para los catequistas de Bautismo, de iniciación a la Vida Eucarística, de Confirmación y Matrimonio, con un enfoque bíblico, teológico y pastoral, en los que expusieron sacerdotes, Diáconos y laicos. Asimismo, realizaron un encuentro con los profesores de Religión de los colegios de la zona, para poder escucharlos y hacerles saber que pueden encontrar un apoyo en el Decanato.

“El año pasado tuvimos una linda experiencia en la Asamblea decanal, las Orientaciones Pastorales primero las trabajamos a nivel decanal”, explicó el decano.  Y agregó: “Les pedimos a cinco parroquias que realizaran una cápsula explicando una Orientación Pastoral y lo bueno es que no lo hicieron ni los sacerdotes ni los diáconos, sino los laicos. Y después lo hicimos a nivel de parroquia, es decir, cada parroquia debía hacer una asamblea o alguna actividad para dar a conocer el tema y se invitó a las mismas personas que habían expuesto antes”.

Viviana Briseño indicó que para el día del catequista se propusieron participar en la actividad que se realizó a nivel diocesano en el Colegio Seminario San Rafael de Viña del Mar y asistieron un gran número de integrantes del decanato.  

Finalmente, el P. Cristian Villalón expresó: “Tenemos muchas actividades en agenda, como por ejemplo, una Misa para niños este sábado 12 en la Catedra de Valparaíso. También, el último sábado de septiembre acompañaremos una actividad de la parroquia Buen Pastor, de Oración Interconfesional por Chile”.

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