El padre Jorge Martínez, junto a diáconos de la comunidad, realizó la bendición de ramos dando comienzo a Semana Santa.

Frente al Colegio Umbral de Curauma se congregaron alrededor de 800 fieles para recordar la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén. El padre Jorge Martínez, junto a diáconos de la comunidad, realizó la bendición de ramos dando comienzo a Semana Santa.

En su homilía el padre Jorge reflexionó sobre el tiempo de cuaresma “El tiempo de Cuaresma es un tiempo de preparación para que nuestro corazón se abra a los demás y no sea indiferente a lo que está pasando a nuestro alrededor, porque Jesús no era indiferente a lo que pasaba en la vida de los demás”.

También recordó a San Alberto Hurtado “siendo sacerdote mientras caminaba en una lluviosa noche, vio a un hombre botado en el camino, reconoció el rostro de Cristo en aquel hombre que sufría, se sacó su abrigo, lo tapó y dijo, “no puedo seguir así, hay muchos cristos que están sufriendo, botados “y comenzó a trabajar, fundó el Hogar de Cristo, pero hizo muchas otras cosas, también se preguntó, ¿Por qué llegan a la calle? porque, una cosa es ayudar a alguien que lo está pasando mal, darle alimento pero hay que preguntarse, ¿Por qué alguien llegó a situación de calle?. Un cristiano no puede callar las injusticias que pasan”.

Finalmente invitó a “vivir la fe con toda la radicalidad que significa, apoyándonos mutuamente, vivamos el evangelio de Jesús, volvamos a preocuparnos de las cosas que Jesús se preocupaba, especialmente de los pequeños y de los que sufren, así mismo de nuestra casa común, la creación”

Fuente: Pastoral de Comunicaciones Parroquia san Pablo de Placilla 

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